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La familia Zwick había estado viviendo en su casa en Neenah, Wisconsin durante más de una década. Siempre supieron que había una puerta metálica oculta en el suelo en su patio trasero, pero nunca la querían abrir. Un día, la familia decidió hacer una brecha en la estructura de metal…
Esa curiosa puerta resultó ser la entrada a un antiguo refugio nuclear construido durante la Guerra Fría. Después de la entrada había una escalera que conducía a un búnker lleno de objetos del pasado
Había llegado el momento de averiguar lo que se escondía detrás de la puerta de metal.
La pesada escotilla de acero escondía la entrada a un búnker de 10 metros cuadrados.
Esta escalera comunicaba la entrada con la sala principal que había que estaba inundada y llena de cajas flotantes con objetos de época.
El propietario anterior había guardado comida y bocadillos por si tenía que pasar una temporada bajo tierra.
“En el búnker había todo lo que uno podía esperar encontrar en un refugio abandonado en los años cincuenta. Había comido, ropa, medicamentos, herramientas, linternas, baterías y todo lo que uno pudiera necesitar en caso de ataque para pasar varias semanas bajo tierra. “
Los productos de época eran la mejor parte del descubrimiento.
“La familia donó todos lo que encontró a la Neenah Historical Society.”
El búnker había actuado como una verdadera cápsula del tiempo y permitía viajar al pasado.
F: Daily Mail
El antiguo propietario era Frank Pansch, un cirujano local que construyó el refugio en 1960, dos años antes de la crisis de los misiles de Cuba. Durante ese tiempo, muchos estadounidenses se prepararon para la guerra nuclear.
Si este descubrimiento te ha sorprendido, no te lo quedes sólo para ti y compártelo con los tuyos.
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